Desayuno casero excepcional

La hospedería ofrece un ambiente acogedor y una atención excepcional. Jorge, nuestro anfitrión, se aseguró de que disfrutáramos cada momento. Las vistas y el entorno histórico son impresionantes, ideales para pasear. El desayuno con huevos revueltos y productos locales hacía que cada mañana comenzara de maravilla.

El único inconveniente podría ser el aparcamiento, que se encuentra un poco alejado de la entrada del hotel, pero esto no empañó nuestra estancia. También, en el pueblo, la opción de restaurantes es limitadísima, lo que nos llevó a buscar opciones dentro de un radio pequeño.

1 Ubicación excelente
2 Desayuno delicioso
3 Trato familiar

1 WiFi limitado
2 Aparcamiento distante

Hermosa vista desde las habitaciones, Proximidad al castillo para exploración, Idílico ambiente de pueblo pequeño

WiFi limitado en las habitaciones, ¡eso es un gran inconveniente para planificar excursiones!!! Además, el aparcamiento está a cinco minutos de distancia, volviendo la llegada y salida un verdadero inconveniente. ¡Con un poco de esfuerzo podrían mejorar eso!!!

El desayuno estaba lleno de productos frescos y buena variedad.

El acceso a internet era casi inexistente en la habitación, lo que hizo difícil coordinar nuestras visitas y actividades. Además, el aparcamiento estaba bastante alejado del hotel, lo que significó cargar con las maletas durante un buen rato. La opción de restaurantes en el pueblo era muy limitada, llevándonos a buscar comida a otras localidades porque las opciones eran escasas y el menú del hotel nos pareció demasiado caro.

Qué experiencia tan increíble! Los platos caseros son un verdadero deleite. Tuve la suerte de disfrutar de un desayuno estupendo, con productos de calidad. La habitación era amplia y limpia, perfecta para relajarme después de un día explorando el bello Castillo de Loarre.

Un pequeño pero, el aparcamiento está a cinco minutos a pie del hotel. Tuvimos que dejar las maletas en la entrada, aunque eso no impidió que nuestra estancia brillara.

He disfrutado mucho de mi estancia, sobre todo gracias a la calidad del desayuno, que era bastante completo, con productos frescos y buena variedad. La habitación era amplia y cómoda, ideal para relajarse después de un día visitando el Castillo de Loarre, que está muy cerca. Jorge, quien nos atendió, fue excepcional y nos dio excelentes recomendaciones sobre lugares para visitar en la zona.

la comida casera fue deliciosa y abundante. el acceso a internet es limitado.

La habitación era amplia y muy limpia, lo que se agradece un montón. Las camas eran cómodas y me ayudaron a descansar bien después de un día de exploraciones. Además, la vista era preciosa, especialmente hacia la iglesia. El trato de Jorge también fue genial, siempre atento a lo que necesitábamos.

Fue un lugar perfecto para un respiro de fin de semana en Loarre, con una excelente relación calidad precio. Jorge, el anfitrión, fue súper amable y siempre estuvo dispuesto a ayudar. Si necesitas un lugar para comer, asegúrate de pedir tu cena con antelación para disfrutar de una buena comida en el comedor del hotel.

una experiencia mágica en un pueblo encantador, ideal para disfrutar de la tradición y la calidez de un desayuno fresco cada mañana

Pasamos una estancia maravillosa, donde la limpieza del hotel y la atención del personal hicieron que cada momento fuera especial. Disfrutamos del delicioso desayuno y la calma del entorno.

la habitación era amplia y cómoda, además el desayuno estaba delicioso y con productos de calidad. el trato de jorge fue excepcional y me dio excelentes recomendaciones para disfrutar del lugar.

la calefacción no estaba encendida temprano.